He escuchado muchas veces eso de "a los amigos los eliges, a la familia no" , lo que nos viene a decir algo así como: estás justificado si no te llevas bien con los tuyos. Sin embargo, la familia no es solo la ineludible relación de parentesco que nos fuerza a mantenernos unidos incluso cuando lo que apetece es la ruptura. La familia es el sistema que nos ha creado, marcando nuestro lugar en el mundo y nuestro lugar en nosotros mismos. Dentro de unos días asistiré a un taller de Constelaciones Familiares, y realmente estoy deseando que llegue el momento. He leído mucho sobre el tema, me interesa dentro de mi obsesión por la Teoría General de Sistemas, siempre busco la explicación a las cosas y la solución a los problemas desde esa visión. Pero debo reconocer que en mi relación familiar siempre me ha costado respetar ese lugar otorgado por el orden en que nací y las relaciones de prevalencia en la jerarquía doméstica. Siempre he intentado ser la hermana mayor siendo
Pensamientos de una estrella de mar